lunes, 15 de octubre de 2018


Algunos elementos sobre la inseguridad y la violencia, en referencia a la situación de la ciudad de Quetzaltenango.
Msc. Edwin Alberto, Castillo Lepe;

Si la violencia es un fenómeno multicausal influido por factores psicológicos, biológicos, económicos, sociales y culturales, entre otros, que al cruzar las fronteras del individuo, familia, comunidad y sociedad, también tiene consecuencias que abarcan el ámbito del individuo, la familia, comunidad y sociedad (Olavarría; 2007, p8), entonces, de modo similar puede decirse que la inseguridad también es un fenómeno multicausal  y que podrían atribuírseles los mismos factores que inciden en la violencia. La inseguridad en todo sentido y ámbito, es indeseable, porque trastorna el comportamiento humano, sumiéndolo en una cadena de insatisfacciones que al negar su potencialidad de ser humano, lo pone al borde del precipicio de la violencia y la inseguridad.

La inseguridad es un fenómeno ligado a la violencia y el delito que afecta a las sociedades en el mundo. Su origen es localizable en el aparecimiento del ser humano sobre el planeta ejerciéndola de distintas formas a través de diversos mecanismos. Según Mauricio Olavarría, “La violencia es un fenómeno intrínsecamente humano y está enraizado desde el origen de la humanidad” (Olavarría; 2007, p8), por lo que es acertado suponer que la “…conflictividad en sí, es parte de la vida y tiene una potencia transformadora, desde la lectura positiva de la teoría de conflictos” (Dahrendorf 1990, en Rosales; 2012, p 13); también Manuel Castells señala: “…el conflicto es el estado natural de la vida y la sociedad…” (Castells; 1979, p 225).

En la historia encontramos antecedentes de violencia como la denominada venganza privada, muy ligada a la ley del talión y del ojo por ojo, que durante la antigüedad al engendrar inseguridad entre los estratos más bajos de la población, era una manera de hacer justicia, que tampoco por su aceptación general, era el mejor medio para resolver los conflictos de esa época.   Si continuara esa forma de hacer justicia, otras serían las características demográficas de la población. De todos modos, aunque haya cumplido el papel de perpetuación de la especie humana, en un momento determinado, tampoco significa que una sociedad de ojo por ojo y diente por diente, sería la mejor expresión del progreso y adelanto de la humanidad. Sin embargo, la violencia con la inseguridad que la acompaña, es un doble fenómeno que al dominar e imponerse sobre la voluntad de los demás, es parte del Estado y del Poder político.

En ese sentido, “…cualquiera que sea el tipo de Estado de que se trate, éste siempre ejercerá alguna forma de poder, el cual es, por su naturaleza, esencialmente violento…” (…) “En síntesis, si el Estado es poder y el poder es violento” (PNUD, 2009-2010 Guatemala; p3), entonces constituye una herramienta histórica, política y social que al generar a todo nivel una sensación de inseguridad y de subordinación al más fuerte que domina y se impone sobre los demás, incesantemente favorece a quienes tienen el poder. Este ejercicio de la violencia se transformó en un mecanismo de ejercicio público, y para ello se designó al aparato del Estado como el encargado de ejercerla a través de sus órganos jurisdiccionales.

Tampoco sirve de consuelo pensar que el aparecimiento de la violencia no solo es un mecanismo de reacción humana, sino  también lo encontramos en los animales como un ejercicio de dominio o sobrevivencia biológica, que en alguna medida se relaciona con la tesis evolutiva de Charles Darwin, la cual  ubica la violencia y el instinto de conservación  como un mecanismo de sobrevivencia del más apto en las condiciones de su entorno, dando como resultado que la naturaleza hasta cierto punto nos enseña que ciertas reacciones, son de sobrevivencia. Sin embargo, en el reino animal al no pensar sus acciones, la violencia y la inseguridad es parte de su naturaleza, que tampoco ocurre de la misma manera en el caso del ser humano quien ha convertido el ejercicio de la misma, no únicamente para su sobrevivencia, sino para imponer su poder, convirtiéndola en signo de dominación.

Actualmente, para nadie es un secreto que el ejercicio de la violencia al generar la condición de inseguridad como una reacción natural del sujeto social, ha sido una estrategia para obligar al sujeto sujetado o en palabras de Heidegger “vivir en estado de interpretado” o enajenado de la realidad lo que le hace al sujeto reaccionar más que pensar su realidad, por lo que   al exigir del gobernante mayores niveles de seguridad, lo que ha implicado en la medida que se exige a cambio de los logros alcanzados, una pérdida creciente de derechos inherentes al ser humano, como su propia libertad y la reducción de su privacidad. 

Con el avance de la tecnología día a día se mira en las calles, que su aplicación pragmática no deja de ser un pretexto para ejercer un mayor control sobre la “delincuencia común”; lo que ha dado como resultado una proliferación de cámaras en las calles, semáforos y centros comerciales, que si bien transmiten la sensación de “seguridad” esta va aparejada a la pérdida de privacidad del ciudadano.  Por lo que no podría divorciarse la explicación que en términos de la modernidad significa que a mayor seguridad, existe una reducción de privacidad y libertad del individuo.
En la investigación realizada en el año 2016 sobre la “Percepción de la inseguridad pública en la ciudad de Quetzaltenango”, se pudo determinar que en algunos casos la inseguridad y violencia se han convertido en un mecanismo para distraer a la población de problemas más urgentes, como la pobreza, el desempleo, corrupción etc. (ver cuadro 1).

                                                                   Cuadro 1

Además, se puedo establecer de cómo en determinadas épocas del año los niveles de la delincuencia sufren repuntes obviamente, ante este tipo de amenazas a la integridad física o los bienes de los ciudadanos, estos han tenido que tomar medidas al respecto, lo que ha implicado cambiar algunas conductas, como el no ir a lugares donde existe aglomeración de personas, o visitar lugares considerados como inseguros, rotondas, parques o mercados.  Y además, variar conductas personales como cambiar de calles, no usar joyas u otros bienes que le puedan ser atractivos a la delincuencia (Ver cuadros 2). “No olvidar que en la calle puede haber un individuo motivado para delinquir, puede haber una persona que inocentemente luce joyas u objetos de valor que son un blanco adecuado, situación que se complica por la ausencia de vigilancia y guardias, para evitar que se lleve a cabo un acto violento o un delito” (en Olavarría; p64; 2007; Cohen y Felson, 1979, citados por Akers 1997; p27)   
                                                                    Cuadro 2


Pero también es importante hacer la diferencia entre la delincuencia común, que sería aquella que se dedica a realizar robos de menor cuantía, y la delincuencia organizada muy vinculada a delitos de mayor envergadura como secuestros, extorsión, o sicariato, con frecuencia vinculadas con estructuras mucho más sofisticadas, que para su funcionamiento necesitan nexos y en muchos de los casos con las mismas instituciones ligadas a la seguridad pública.

El problema de la violencia y el delito como elementos que incrementan la inseguridad entre los ciudadanos, también viene generando problemas de carácter psicosocial, en las víctimas y es por ello que reacciones como; “el shock, confusión, miedo generalizado, ansiedad, depresión, síntomas somáticos y fisiológicos, vergüenza e incluso, en algunas ocasiones sentimientos de culpa, miedo a morir, conductas de evitación, hostilidad y baja autoestima, indefensión, perdida del interés en actividades cotidianas, cambios radicales en las formas de vida, necesidad de apoyo social formal e informal, son inevitables en la medida que la sociedad no brinde las oportunidades de empleo e ingreso a una parte considerable de la población, para satisfacer sus necesidades básicas. La violencia criminal, en definitiva, afecta a las personas a nivel físico-biológico, cognitivo, psicológico, conductual, interpersonal y espiritual.  En el caso de los niños, además, la exposición a la violencia puede afectar a su futuro desarrollo moral y a sus logros académicos.” (Herrero; 2001, p 110)

En la ciudad de Quetzaltenango hay lugares que los entrevistados consideraron con alta propensión a la inseguridad como podrían ser; El Parque Central localizado en la zona 1, la rotonda en la zona 2 y en la zona 3 el Mercado la democracia y la Terminal (Ver cuadros 3), por lo que estas condiciones generan externalidades negativas, cuyas consecuencias son preocupantes. Una de ellas es el temor a la inversión económica y temor para establecer nuevas empresas como generadoras de empleo, otra es el amedrentamiento de las ya existentes o el pánico por el pago de cuantiosas sumas de dinero que incrementan sus costos por extorsión para seguir funcionando, y otra es el trastorno de empresarios que deciden cerrar la empresa o trasladarse a otro lugar.  En todo caso los empresarios por su carácter de iniciativa privada, debido a la violencia e inseguridad, siempre buscan áreas en las cuales la tasa de ganancia deberá ser más elevada para mantener algún nivel de rentabilidad, con lo cual trasladan el incremento de sus costos, al consumidor final.
                                                               
                                                                Cuadro 3

La violencia y la inseguridad siguen siendo muy preocupantes, porque ´´…los costos de la violencia en Guatemala para el año 2005 alcanzaron un monto aproximado de unos US$ 2,386.7, cifra equivalente al 7.3% del PIB. Tal cifra equivale a unos Q 17,900.4 millones´´ (PNUD; p16; 2006). Sin duda, esos montos siguen creciendo a corto, mediano y largo plazo.
                                                              
Desde esa perspectiva, “Cada año la violencia cobra a la sociedad altas cantidades de recursos en servicios de salud, pérdida de capital social, costos legales…”  (PNUD; p12; 2006), circunstancias que experimenta la población del país, principalmente los más vulnerables.

Por otra parte, “…es innegable la urgencia de una política de seguridad ciudadana, dentro de una estrategia de desarrollo económico social, en la que las medidas de prevención y de rehabilitación serán prioritarias…” (PNUD; p13; 2006).
Robert Merton, señala: “La cultura tiene exigencias incompatibles para los situados en los niveles más bajos de la estructura social.  Por una parte se les pide que orienten su conducta hacia la perspectiva de la gran riqueza” (…)” …y por otra, se le niegan en gran medida oportunidades efectivas para hacerlo de acuerdo con las instituciones´´ (p155; 1965).

Alrededor de la conducta desviada en gran escala, según Merton: “Solo cuando un sistema de valores exalta, virtualmente por encima de todo lo demás, ciertas metas o denominados éxitos comunes para la población en general, mientras que la estructura social restringe rigurosamente, o cierra por completo el acceso a los modos aprobados de alcanzar esas metas a una parte considerable de la misma población, se produce la conducta desviada en gran escala” (Merton; 1965, p155); o se podría interpretar como el caldo de cultivo para generar inseguridad y violencia.

Agrega Merton: “Cuando la estructura cultural y la social están mal unificadas, exigiendo la primera una conducta y unas actitudes que la segunda impide, hay una tendencia al quebramiento de las normas, hacia la falta de ellas” (Merton; p170; 1965). Al parecer, el rompimiento de las normas tiene un final obscuro, porque “la población carcelaria aumento en una década de 6 mil 826 reclusos a 21 mil 45, y el año que más se incrementó el número fue entre el 2014 y 2015, cuando sumo 2 mil 551, aunque hasta el 21 de diciembre de 2016 se detuvo a 2 mil 211 personas” (Prensa libre, 3 de enero de 2017), en la misma nota periodística se agrega; que según Mario Hernández Romero, abogado penalista, explico que se han mezclado personas que están sujetas a proceso con sentenciados, lo cual está en contra de la Constitución.  Lo que ha generado implicación que se podría estimarse que más de la mitad aún no están procesados; sin duda, otras estrategias de excarcelación razonables basadas en la prevención social, asegurarían la disminución de la violencia e inseguridad.    

Además, la inseguridad y la violencia siguen siendo preocupantes porque “La situación contemporánea de los sistemas penales mundiales, ha sido explicada por la literatura criminológica y jurídica críticas, como una crisis de legitimidad que parte de su incapacidad para proveer soluciones pacificadoras, mediante la intervención estatal justa y oportuna en los conflictos más perniciosos” (Rosales; 2012, p13). 

Y la situación del país sigue siendo violenta e insegura, además se podría agregar y tal como Rosales interpreta la realidad Venezolana, que no se diferencia mucho de la realidad de Guatemala “… la desigualdad, tiene un impacto dramático y harto conocido en el orden mundial histórico, derivado de la sujeción de los derechos al capital. La dependencia de los derechos al capital, es un fenómeno estructural que se define aquí, como la capacidad que tiene el capital en el orden mundial, para determinar la mayor o menor garantía del acceso real a los derechos en general” (Rosales; 2012, p 47).

La violencia y la inseguridad son evitables, en la medida que la sociedad en su conjunto, asegure duraderamente a toda la población, la satisfacción de sus necesidades básicas. Lo que implicaría oportunidades económicas y sociales como; tierra, créditos con plazos e intereses razonables, capacitación agrícola, empleo, salud, educación, deporte, recreación, un medio ambiente sano y respeto absoluto e incondicional para los territorios, en esa medida, gradualmente desaparecerá la violencia y la inseguridad; hasta hoy la violencia e inseguridad son crecientes en el país, a partir de la desigualdad generalizada que la población experimenta; por lo que solamente el establecimiento de un Estado democrático, plural y participativo, estaría en mejores condiciones para resolver con seriedad, el problema de la violencia e inseguridad; por el momento a nivel de Guatemala, eso aún no ocurre, pues todavía es un utopía política.

Ante esta realidad guatemalteca, es muy importante tomar en cuenta lo que plantea  Elsie Rosales, cuando “… propone comprender desde el pensamiento complejo y con un enfoque crítico e interdisciplinario, los sistemas penales y derivar de tal conocimiento, soluciones sustentables que fortalezcan la garantía de los Derechos Humanos dentro del Estado Constitucional” (Rosales; 2012, p 11). Lo que estaría generando como premisa la desaparición de la inseguridad y la violencia,

 “Es un imperativo de todo Estado como de su aparato de justicia, responder pronto, sensible y adecuadamente para la reparación y restablecimiento de la víctima. Si esto no sucede y la colectividad siente temor de su policía, desconfianza de sus fiscales y jueces, de sus instituciones, de la delincuencia, se va fracturando el Estado y capacidad de guarecer a su población en sus derechos, hacerlos vigentes, reales, efectivos” (Rosales; 2012, p52), y por lo tanto ante esa percepción de la población, se incrementa la inseguridad y la violencia y la desconfianza en la funcionabilidad del aparato Estatal.
Por lo tanto “…la justicia es un asunto político, constitucional, de alta política, central en la vida de los Estados contemporáneos (Rosales; 2012, p 52), la justicia en el marco constitucional, es una condición indispensable para que desaparezca la inseguridad y la violencia.

Entonces “…el postulado de democratización de la justicia, debe ser un eje transversal de toda política penal, más en la región debido al alto desequilibrio social, pero con el objetivo preciso de hacer la justicia más respetuosa para todos” (Rosales; 2012, p 48).  Bajo este supuesto si eso llegara a ocurrir en Guatemala, quedaría resuelto el problema de la inseguridad y la violencia.

En conclusión, se podría afirmar que la violencia a pesar de tener orígenes históricos y en alguna medida, estar ligada a reacciones biológicas del mismo ser humano, gran parte de ella ha sido aprovechada por grupos de poder para constituirla en un negocio lucrativo de seguridad, que además, puede entenderse como parte de la estrategia de control por medio de la cual, al crear el problema y plantear la solución, no deja de ser un mecanismo de control social, dentro de las actuales medidas de ingeniería social.

En lugares como la Ciudad de Quetzaltenango no han quedado exentas de este flagelo, dando implicaciones como las arriba señaladas; miedo en la población y disminución en la posibilidad del uso de sus libertades individuales, y además provocando efectos de carácter psico-biológicos y perdidas en su patrimonio.


   

Bibliografía
1.    Balsells Conde, Edgar Alfredo; El costo económico de la violencia en Guatemala; Editor, Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD); Guatemala 2006.
2.    Castells, Manuel; Ciudad, democracia y socialismo; Siglo XXI Editores; México 1979.
3.    Herrero, Carmen (2001,) Los Efectos de la Violencia Sobre sus Víctimas, Facultad de Psicología Universidad de Salamanca. Recuperado de http://www.psicothema.com/pdf/3480.pdf
4.    Merton, Robert K.; Teoría y Estructura Sociales; Fondo de Cultura Económica EFE; Traducción de Florentino M. Torner; México, 1965.
5.    Olavarría Gambi, Mauricio; Delito y Violencia. Causas, Consecuencias y Estrategias de Prevención; Documentos Apoyo Docente, No.20 Nov. 2007; Instituto de Asuntos Públicos INAP, Universidad de Chile. Chile, 2007.
6.    Palma, Claudia (3 de enero de 2017), Numero de reos se triplica en tres años, Prensa Libre, Recuperado de;  http://www.prensalibre.com/guatemala/justicia/numero-de-reos-se-triplica-en-diez-aos
7.    Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo PNUD; Guatemala: hacia un Estado para el Desarrollo Humano; Informe nacional de desarrollo humano 2009-2010, Guatemala 2010.
8.    Rosales, Elsie; El Sistema Penal Venezolano Contemporáneo, Tendencias y propuestas; Universidad Nacional Experimental de la Seguridad UNES Venezuela, octubre 2012.    

sábado, 9 de noviembre de 2013

La medición del desarrollo y la prosperidad de un país. Guatemala

La medición del desarrollo y la prosperidad de un país.
El caso de Guatemala


La forma que se han construido los indicadores que miden la mejora en las condiciones de vida de los ciudadanos de un país han  está cambiando, para ir tratando de generar una metodología que pueda incluir la mayor parte de información  que puedan reflejar la mejora en las condiciones de vida humana.



Si la clasificación de la prosperidad a nivel mundial fuese únicamente productiva o monetaria, como se puede apreciar en la gráfica No. 1 seria Estados Unidos de Norte América el  que ocuparía el primer lugar a nivel mundial y en el caso de América Latina Brasil sería el primero y Guatemala estaría en el puesto  81 a nivel mundial.

Si la clasificación se diera por el  ingreso per cápita seria Liechtenstein el primer país a nivel mundial como se puede observar en la gráfica No. 2, y en el caso de  Estados Unidos pasaría el puesto 12  y el primer latino Americano seria Argentina en el puesto 68, y en el caso de Guatemala estaría ubicado según el Fondo Monetario Internacional para lo que fue el año 2012 el puesto 123 de 187 países.[1]  Aunque este tipo de indicadores ha recibido críticas, debido a su metodología que simplemente divide el PIB entre la población lo que deja fuera variables como la concentración de la riqueza, ya que en teoría todos recibirían proporcionalmente una parte de la riqueza generada en el país.



Otra forma de ver el desarrollo de un país a partir de su IDH (Índice de Desarrollo Humano) el cual ha logrado superar las limitaciones que otras metodologías no habían tomado en cuenta, el caso del IDH toma en cuenta “tres variables:

1.    Esperanza de vida al nacer.  Analiza el promedio de edad de las personas fallecidas en un año
2.    Educación. Recoge el nivel de alfabetización adulta y el nivel de estudios alcanzado (primaria, secundaria, estudios superiores)
3.    PIB per Cápita (a paridad de poder adquisitivo). Considera el producto interno bruto per cápita y evalúa el acceso a los recursos económicos necesarios para que las personas puedan tener un nivel de vida decente.

 El índice  IDH aporta valores entre 0 y 1, siendo 0 la calificación más baja y 1 la más alta.“[1]   Como se puede apreciar en el cuadro No. 1 es Noruega el que encabeza este índice, Estados Unidos  se encuentra el puesto tres.  Y siendo en el caso Latino Americano es Chile el primer país que aparece en este ranking mundial en el puesto 40, y en el caso de los Centro Americanos es Costa Rica en el puesto 62, y Guatemala se encuentra relegado al puesto 133 de 186.


En el continente Americano tal y  como se aprecia en el cuadro No. 2, encontramos entre los diez más altos en este índice se encuentra encabezado por Estados Unidos de Norte América, y el primer Latino Americano que se encuentra es  Chile en el puesto 4.   Y dentro del IDH más bajos se encuentra Haití encabezando esa clasificación, pero siendo Guatemala el  segundo país con el peor índice, pero que se le considera con IDH medio, pero con tendencia al deterioro, lo que podría provocar que  con facilidad podría caer a los que se consideran con un IDH bajo.


Otra metodología que se utiliza para medir el grado de desarrollo de los países es el índice de prosperidad el cual busca evaluar la riqueza mundial y el bienestar, esta comparación se realiza entre 142 países del mundo, entre los ejes importantes que se toman en cuenta están: economía, educación, emprendimiento y oportunidad, la gobernanza, la salud, la libertad personal, la seguridad y así también la seguridad social y capitales.

El índice por lo tanto se construye a partir de evaluar los ejes arriba mencionados, partiendo de que las personas de forma principal consideren que la prosperidad no es únicamente la posesión de dinero, sino, que también la mejora en la calidad de vida.   Por lo tanto este índice no define únicamente la posición de los países tomando en cuenta el contar con un Producto Interno Bruto elevado, sino también toma en cuenta la percepción subjetiva de los ciudadanos en el sentido de considerarse felices, sanos y libres.

Según el índice de prosperidad a nivel mundial se reflejan en los  datos  del cuadro No. 3, Noruega es el país que encabeza la clasificación de los primeros diez a nivel mundial, nueve de ellos son Europeos únicamente Canadá es ajeno.    En el caso de Guatemala se encuentra en el puesto 90, por debajo de Costa Rica, Salvador, Nicaragua y Panamá.


Siendo Canadá el que encabeza el ranking en América y ocupando el puesto 3 a nivel mundial y el primer país de América Latina es Uruguay y ocupa el puesto 30 a nivel mundial, en cuanto a  Centro América encontramos a Costa Rica el cual se ubica en el segundo lugar de América Latina y el número 31 a nivel Mundial, y Guatemala que se encuentra en el puesto No. 90  a nivel mundial.

Si ya solo se analiza el ranking de América, Guatemala se encuentra ubicado en el puesto 22 de 24 países  y  a nivel de América Latina se ubica en el puesto 20 solo encontrándose por debajo Honduras que se encuentra ubicado en el puesto 96 a nivel mundial y Haití que se encuentra en el puesto 134 respectivamente.

En el caso de Guatemala en términos generales si comparamos las características generales del índice de prosperidad , en Guatemala es más costoso crear una empresa en relación al ingreso nacional bruto que en Costa Rica, otro elemento relevante es que en el caso de Guatemala la percepción que se tiene por lo habitantes en relación a la inmigración, no es muy positiva comparada con  Costa Rica.


Entre los datos importante en el aspecto económico Guatemala es su mayor parte se encuentra por debajo de la media global como se aprecia en el cuadro No. 4, a excepción  de la situación laboral, pero también es relevante hacer notar que en Guatemala el sector informal es importante en la generación de empleo, lo que ha venido a ser un tubo de escape para que el sistema laboral no entre en crisis más profunda.   Otro elemento  es el bajo nivel de ahorro interno que se tiene en el país, lo que provoca escasas posibilidades de inversión en el país y dependiendo del ingreso externo.

Aspectos como la participación de la alta tecnología en la participación de las exportaciones, representa la mitad del promedio global, lo que indica que el país no está generando las condiciones en educación  e investigación para poder entrar en esta dinámica.  La tasa de inflación en términos macroeconómicos diríamos que ha sido manejada de forma controlada.  La percepción de sus ciudadanos en relación a sentirse satisfecho con el nivel de vida se encuentra por encima de la media global, lo que llama la atención a pesar de las condiciones económicas en las que se encuentra la mayor parte de la población. 


        CONCLUSIONES

En términos generales existen diferentes formas de medir el desarrollo y la prosperidad de los países, donde en cada uno de ellos se busca tratar de incluir la mayor cantidad de variables económicas y sociales que puedan medir las condiciones generales.
 
En la mayor parte de metodologías coinciden los países que tienen mejores condiciones de vida, pero también es necesario hacer notar que cuando se incluyen elementos subjetivos, como lo es en el índice de prosperidad; países como Guatemala que en otras clasificaciones  como el IDH, PIB o PIB per Cápita, se encuentra rezagado en este mejora su posición a nivel mundial.   Pero aun así con un ostensible rezago en relación a la clasificación de América Latina y no digamos de Centro América.


[1]    http://economy.blogs.ie.edu/archives/2009/10/%C2%BFque-es-el-indice-de-desarrollo-humano-idh.php


[1] http://www.indexmundi.com/g/r.aspx?t=100&v=67

martes, 10 de septiembre de 2013

PARTICIPACIÓN Y REFORMA UNIVERSITARIA: CENTROS UNIVERSITARIOS

PARTICIPACIÓN Y REFORMA UNIVERSITARIA:
CENTROS UNIVERSITARIOS
Edwin Castillo Lepe

Los profesionales que integramos el cuerpo de docentes de los Centros Universitarios, observamos atentamente el proceso de Reforma Universitaria.   Se ha visto  con preocupación el hecho de no llegarse a acuerdos concretos en cuanto a la aceptación de la metodología de Reforma Universitaria, a pesar de haberse tomado la rectoría por parte de estudiantes que en su mayoría habían estado participando en la elaboración de la metodología, y de reclamar el derecho a respetar los avances y acuerdos que se habían logrado en este proceso.

Es preocupante constatar como en los centros universitarios  - que con una reforma autentica deberían de salir beneficiados en mejorar su participación en la toma de decisiones en esta casa de estudios superiores, es donde más se desconoce del proceso, debido a la escasa divulgación de esta problemática.

En la actualidad, los Centros Universitarios se encuentran relegados en la toma de decisiones.  Por ejemplo, en la elección de las autoridades del consejo superior universitario, los profesores y estudiantes están relegados de elegir al rector, y mucho menos a poder participar con representantes directos dentro de dicho ente.  Los profesores solo ejercen su derecho a voto a través de sus respectivos colegios, haciéndolo de forma indirecta.   En este caso se estaría vedando el derecho que le otorga a todo guatemalteco  la constitución política de la república de “elegir y ser electo”[1], en el caso de los estudiantes ellos quedan excluidos de la elección.

La ley orgánica de la Universidad de San Carlos de Guatemala plantea que la integración del Consejo Superior Universitario estará integrado por;[2] el Rector que lo preside, los Decanos de las Facultades, un representante de cada Colegio profesional, de preferencia catedrático de la Universidad y un estudiante de cada Facultad, lo que en la práctica deja fuera a los centros universitarios y demás instituciones universitarias que no se apeguen a esta figura jurídica.  Se hace necesario buscar alternativas para viabilizar la participación democrática de la mayor parte de la población universitaria sin ningún distingo. 

Otro ejemplo que va en este sentido es el aspecto presupuestario, en la actualidad la estructura presupuestal de la universidad se encuentra integrada en cinco conceptos que serian: Funcionamiento, transferencias, inversión e investigación, así también desarrollo.



Como se puede apreciar en el cuadro No 1, son dos rubros los que absorben en mayor cantidad el presupuesto de egresos de la Universidad de San Carlos de Guatemala, siendo estos; funcionamiento y transferencias,[1]  en promedio para los dos  años, el 96 % del presupuesto.



En el cuadro No. 2, es el Centro Universitario de Occidente el que tiene el mayor aporte en cuanto a los gastos de funcionamiento, representando el 26% del total de Centros, y el que sería el menor Zacapa con el 1 %; pero es importante tomar en cuenta que el Centro Universitario de Occidente es uno de los centros con mayor matricula estudiantil, superando los trece mil estudiantes.   Los centros universitarios en su totalidad representan el 21 % del total de gastos en funcionamiento de la Universidad de San Carlos de Guatemala.

Además de lo antes mencionado la inversión por estudiante anual fluctúa entre los Q. 2,030, por estudiante y los Q. 5,716, a excepción de Zacapa que por la cantidad de estudiantes que cuenta seria el más elevado, pero es el que en proporción al resto de Centros recibe el menor aporte.

En conclusión se podría afirmar que los Centros Universitarios, que en alguna medida representan la educación superior pública y la oportunidad para cientos o miles de habitantes que están esperando una oportunidad, para mejorar su condición académica, para poder convertirse en agentes de cambio y con ello reproducir la tan anhelada academia en las diferentes comunidades, y generar la construcción de planteamientos para lograr reducir los elevados niveles de pobreza y desempleo coyuntural y estructural, que se da en estas áreas de influencia de los Centros Universitarios, actualmente están recibiendo el 21 % de total de los gastos de funcionamiento de esta casa de estudios superiores.  De lo anteriormente expuesto, esto genera la necesidad que en la tan necesaria reforma universitaria se empiece a tomar en cuenta, este tipo de aspectos que vendrían a democratizar el actuar de la universidad.

[1] Según las normas presupuestarias de la USAC, se comprenderá por funcionamiento a; contratación de servicios personales, contratación de servicios no personales, adquisición de materiales y suministros, maquinaria y equipo, bienes inmuebles, contratación de obras de construcción y otros relacionados con el funcionamiento de los programas.  Y transferencias a; comprende las estimaciones de aguinaldo, diferido, contribución de la universidad al plan de prestaciones. derechos post-morten, vacaciones proporcionales. Complementos IGSS, reserva para la aplicación de política salarial y otros.

[1] Articulo 136, inciso b
[2] Ley Orgánica de la USAC, Titulo III y articulo 13

lunes, 20 de mayo de 2013

¿Como los humanos nos condicionamos? y el síndrome de Salomón.


¿Como los humanos nos condicionamos? y el síndrome de Salomón.

Msc  Edwin Castillo Lepe

“La conformidad es el proceso por medio del cual
los miembros de un grupo social cambian 
sus pensamientos, decisiones y comportamientos
para encajar con la opinión de la mayoría”
SALOMON ASCH

Salomon Asch reconocido psicolologo Norte Americano,  realizo un experimento que nos demuestra  como una  minoría puesta de acuerdo puede con facilidad influir en las decisiones de una mayoría, que no es capaz de tomar sus propias decisiones y mantenerlas, debido a la presión externa de mantener “verdades” que son sociablemente aceptadas.

En este mismo sentido en la actualidad siguen jugando un papel importante los medios de comunicación, la educación, la filosofía y la religión, etc;  nos proporcionan  los condicionamientos para homogenizar el pensamiento del ser humano.  Y cualquiera que se salga de ese estándar es marginado y tachado de hereje, loco y demás epítetos, para juzgarlo y descalificarlo.  

En el experimento que realizo en 1951 el reconocido psicólogo estadounidense Salomon Asch en el cual “el  fue a un instituto para realizar una prueba de visión.  Al menos eso es lo que les dijo a los 123 jóvenes voluntarios que  participaron –sin saberlo- en un experimento sobre la conducta humana en un entorno social.  El experimento era muy simple.  En una clase de un instituto se junto a un grupo de siete alumnos, los cuales estaban compinchados (de acuerdo) con Asch.  Mientras, un octavo estudiante entraba en la sala creyendo que el resto de chavales participaban en la misma prueba de visión que él.

Haciéndose pasar por oftalmólogo (oculista), Asch les mostraba tres líneas verticales de diferentes longitudes, dibujadas junto a una cuarta línea.  De izquierda a derecha, la primera y la cuarta medían exactamente lo mismo.  Entonces Asch les pedía que dijesen en voz alta cual de entre las tres líneas verticales eran igual a la otra dibujada justo al lado.  Y lo organizaba de tal manera que el alumno que hacía de  cobaya (conejillo de indias) del experimento siempre respondiera en último lugar, habiendo escuchado la opinión del resto de compañeros.

La respuesta era tan obvia y sencilla que apenas había lugar `para el error.  Sin embargo, los siete estudiantes compinchados con Asch respondían uno a uno la misma respuesta incorrecta.  Para disimular un poco se ponían de acuerdo para que uno o dos diera otra contestación, también errónea.   Este ejercicio se repitió 18 veces para uno de los 123 voluntarios que participaron en el experimento.  A todos ellos se les hizo comparar las mismas cuatro líneas verticales, puestas en distinto orden.

Cabe señalar que solo un 25% de los participantes mantuvo su criterio todas las veces que les preguntaron; el resto dejo influir y arrastrar al menos en una ocasión por la visión de los demás. Tanto es asì, que los alumnos cobayas respondieron incorrectamente más de un tercio de las veces para no ir en contra de la mayoría.  Una vez finalizado el experimento los 123 alumnos voluntarios reconocieron que, distinguían perfectamente que linea era la correcta, pero que no lo habían dicho en voz alta por miedo a equivocarse, al ridículo o a ser el elemento discordante del grupo .”[1]

Como se aprecia en la descripción precedente en muchas ocasiones el ser humano es vulnerable a condicionamientos, que por temor a revelarse ante ellos, los mantiene y los reproduce y en algunas ocasiones los acepta  a conveniencia. 



[1] http://elpais.com/elpais/2013/05/17/eps/1368793042_628150.html

lunes, 18 de marzo de 2013

EL INDICE DE DESARROLLO HUMANO AÑO 2013


EL INDICE DE DESARROLLO HUMANO AÑO 2013

El IDH es un indicador propuesto por el programa de naciones unidas para el desarrollo, con el objetivo de que pudiera servir de comparación entre diferentes países, y así  medir el avance en aspectos como: educación, salud, riqueza. 


Por  lo que se podría considerar al IDH como: “El proceso por el que una sociedad mejora las condiciones de vida de sus ciudadanos a través de un incremento de los bienes con los que puede cubrir sus necesidades básicas y complementarias y de la creación de un entorno en el que se respeten los derechos humanos de todos ellos.

Es la cantidad de opciones que tiene un ser humano en su propio medio, para ser o hacer lo que el desea ser o hacer.  A mayor cantidad de opciones  mayor desarrollo humano, a menor cantidad de opciones, menor desarrollo humano.   El Desarrollo Humano podría definirse también como una forma de medir la calidad del entre humano en el medio que se desenvuelve, y una variable fundamental par la calificación de un país o región.”[1]

El programa clasifica a los países en rangos que pueden ir de muy altos, altos, medio, y bajo, y que podría considerarse que el primer rango agrupa a los países desarrollados y los tres siguientes a los países en vías de desarrollo.

En este índice se considera que el país se acerque a la unidad, es el que tiene mejore s condiciones, mientras que más se aleje de esta o sea tienda a cero, las  condiciones son menores, en cuanto a los indicadores que se miden.
Como se puede apreciara en la gráfica siguiente el país a nivel mundial que presenta las mejores condiciones es Noruega y de los países que mejor ha ido superando sus condiciones es China, indudablemente este ultimo debido a su constante crecimiento como potencia económica a nivel mundial.

                                             Fuente: NOTIMEX

Para el caso de América el país que presenta las mejores condiciones es Estados Unidos de Norte América, seguido de Canadá que son países considerados desarrollados.   Podría considerarse que uno de los países de América que más ha avanzado en su IDH  y que no es parte de los países desarrollados ha sido Brasil, México y Chile.

En el caso de Guatemala  como se puede apreciar en la gráfica  este se clasifica en el segundo lugar en peores condiciones, después de Haití, que sería el que ocupa el último, en el caso  de Haití se clasifica dentro de los de índice de desarrollo humano bajos, pero Guatemala por muy escasos decimales diez todavía lo clasifican en un rango intermedio.

                                             Fuente: http://wikipedia.org/



[1] http://es.wikipedia.org/

domingo, 3 de marzo de 2013

RANKING DE UNIVERSIDADES DE AMÉRICA LATINA, AÑO 2012

METODOLOGÍA.


El indicador compuesto actual ahora se construye de la siguiente manera:
"Visibilidad (50%)
IMPACTO . La calidad de los contenidos, se evaluó a través de un "referéndum virtual", contando todos los enlaces entrantes que recibe el webdomain Universidad de terceros. Esos enlaces se reconoce el prestigio institucional, el rendimiento académico, el valor de la información, y la utilidad de los servicios como introducidos en las páginas web de acuerdo con los criterios de millones de editores web de todo el mundo. Los datos de visibilidad enlace se obtiene de los dos proveedores más importantes de esta información:Majestic SEO y ahrefs . Ambos utilizan sus propios rastreadores, la generación de bases de datos diferentes que deben ser utilizados en conjunto para llenar las lagunas o corregir errores. El indicador es el producto de la raíz cuadrada del número de enlaces entrantes y el número de dominios originarios los vínculos de retroceso, por lo que no sólo es importante la popularidad de enlace, pero aún más la diversidad de enlace. El máximo de los resultados normalizados es el indicador de impacto.
Actividad (50%)
PRESENCIA (1/3). El número total de páginas web alojadas en el webdomain principal (incluyendo todos los subdominios y directorios) de la universidad como un índice por el mayor motor de búsqueda comercial ( Google ). Cuenta todas las páginas web, incluyendo todos los formatos reconocidos individualmente por Google, las páginas estáticas y dinámicas y otros archivos ricos. No es posible tener una presencia fuerte sin la contribución de todos en la organización como los principales contendientes ya son capaces de publicar millones de páginas web. Tener dominios adicionales o alternativos de los centrales para los idiomas extranjeros o con fines de marketing penaliza en este indicador, y también es muy confuso para los usuarios externos.
APERTURA (1/3). El esfuerzo global para crear repositorios institucionales de investigación se reconoce explícitamente en este indicador que tiene en cuenta el número de ficheros ricos (pdf, doc, docx, ppt), publicado en sitios web de acuerdo con el académico de motores de búsqueda de Google Académico . Tanto el total de archivos tanto en los registros totales y aquellos con los nombres de archivos correctamente formados son considerados (por ejemplo, los archivos de Adobe Acrobat debe terminar con el sufijo pdf.). El objetivo es considerar las publicaciones recientes que ahora son los publicados entre 2008 y 2012 (período nuevo).
EXCELENCIA (1/3). Los trabajos académicos publicados en revistas internacionales de alto impacto están jugando un papel muy importante en el ranking de Universidades. Usando simplemente el número total de documentos puede ser engañoso, por lo que se restringe el indicador sólo a aquellas publicaciones excelentes, es decir, la salida de universidad científica ser parte del 10% más citados en sus respectivos campos científicos. Aunque esta es una medida de la producción de alta calidad de las instituciones de investigación, el proveedor de datos Scimago grupo suministra valores distintos de cero para más de 5200 universidades (período 2003-2010). En próximas ediciones se pretende hacer coincidir los períodos de cómputo entre Scholar y fuentes SCImago." 1






1. http://webometrics.info